12/1/09

Estado

Eternas preguntas mueven mi cabeza como una coctelera. Me obsesionan los espejos, los espejos fracturados, los espejos rotos, en el suelo fragmentando lo que ven tus ojos, esas líneas negras que ya no te devuelven lo que eres...la felicidad es tan barata cómo sencilla, simplemente tener tiempo y contemplar como el sol inunda mi salón y derrite los restos de nieve esparcidos por mi terraza, una taza de café y una hora para dormitar en un sofá que alquilo con el resto de la casa. Y te preguntas qué quieres, qué es lo que te queda, si te quedan fuerzas para recobrar la normalidad o si simplemente luchas contra fantasmas, te preguntas que conflictos aún no has conseguido resolver en ese pantano que tienes por mente, y por qué te cuesta tanto ilusionarte con lo que tienes...

1 comentario:

Nikaperucita dijo...

Que rarose me hace leerte tan profundo :)
Pero me gusta, si seño
(Beirut!!!!!!! (L)*)