Gilipolleces

Uno no es responsable de las falsas leyendas que circulan por ahí, quizás no supe cortarlas a tiempo y ahora me envuelven cada vez que doy más de dos pasos. Será esto el comienzo de un nuevo texto o de una extraña entrada a mi subconsciente. Cuando me aburro me gusta improvisar frases sin sentido que sugieran algo y después tratar de completar un texto con sentido, pero últimamente solo pienso en jugar con ellas y con los conceptos que se esconden detrás de tus ojos. Porque el mundo que hay detrás de tus ojos es lo que me interesa y es lo que me estoy perdiendo cada dia. Rotundo y sincero, me queda resolver cual es el reflejo de esos ojos para buscar tu cara. Ojos y más ojos, ojeras. Ahora que anochece más temprano y la oscuridad te avisa de que el dia ya no está es más fácil sentirse mueble. Más silla de madera de pino ILVAR que mesilla de noche ENDLAND, pero al fin y al cabo quién no estaría de acuerdo en que, mas que tener nombre, lo importante es ser llamado. A la ciudad le faltan campanas, demasiado silencio hora tras hora, incluso los coches parecen moverse de puntillas, demasiado silencio incluso para un sordo, es un presagio que, al contrario que en las películas, indica que no va a pasar nada.